Consejos para encontrar sillín
1. ENCUENTRA EL SILLÍN CON LA FORMA CORRECTA
No hay dos personas iguales. Por eso existen tantos sillines distintos. En primer lugar, la forma de tu sillín depende de tu sexo. Normalmente, las mujeres se sienten más cómodas sobre un sillín más ancho, específico para su anatomía.
No obstante, la forma del sillín también depende de tu disciplina. ¿Corres en circunstancias extremas, como descensos, por ejemplo? Si es así, necesitarás un tipo de sillín diferente al de un mountainbiker, que busca el más ligero posible, o un corredor de carretera que permanece sentado en el sillín muchas horas seguidas. Cuando busques el sillín perfecto, es importante buscar el más adaptado a tu disciplina.
2. TEN EN CUENTA TU FLEXIBILIDAD Y TU POSICIÓN SOBRE LA BICICLETA
Prueba tu flexibilidad. Hazlo sentándote en el suelo y estirando las manos hacia los pies. ¿Hasta dónde llegas? ¿Te cuesta inclinarte siquiera hacia delante? Entonces eres poco flexible. ¿Logras tocarte los dedos de los pies? Entonces eres muy flexible. Si llegas a un punto medio, entonces eres bastante flexible. Las personas menos flexibles tienen tendencia a moverse mucho sobre el sillín. Para ellos funciona mejor un sillín más redondeado. Un ciclista flexible tiene una posición más estable sobre la bicicleta y tiende a sentarse más cómodamente en un sillín plano, que le proporciona más libertad de movimiento. Un ciclista muy flexible se beneficiará más de un sillín ligeramente curvado.
Poder sentarte cómodamente en la bici depende, en gran medida, de tu posición de pedaleo. Algunos ciclistas prefieren una posición vertical, pero otros optan por mantener una posición más deportiva, incluso aerodinámica. Cuanto más te inclines hacia delante, más presión ejercerás sobre la zona delantera de tu área pélvica. Esto puede ocasionar dolores y entumecimiento. Escoge un sillín que se adapte a tu posición de pedaleo y alivie la presión sobre las partes cruciales de tu cuerpo. Así es como puedes prevenir el dolor sobre el sillín.
3. MIDE EL ANCHO DE TUS ISQUIONES
Los sillines se presentan en distintos anchos. Si conoces el tipo de sillín que buscas y tu posición de pedaleo, te resultará sencillo escoger un sillín. Pero recuerda que los sillines están disponibles en varios anchos. El ancho del sillín dependerá de la distancia entre tus isquiones. Tomando esta medida, podrás descubrir el sillín más idóneo.
4. REGULA LA ALTURA PERFECTA DE TU SILLÍN
Ahora que has encontrado el sillín perfecto, el siguiente paso es ajustarlo a la altura correcta. Esto contribuye a lograr un pedaleo más eficiente y ayuda a prevenir la aparición de síntomas irritantes. Dada la importancia de establecer la altura correcta del sillín, aconsejamos realizar un ajuste profesional en FITBIKE para determinar la altura del sillín, para que así no tengas que seguir estimándola.
5. POSICIÓN DEL SILLÍN
Asegúrate de que el sillín esté horizontal. Si la punta del sillín apunta demasiado arriba o abajo, podrías experimentar incomodidad en ciertas áreas indeseables. Si el asiento está demasiado inclinado hacia delante o atrás, podría derivar en problemas con tu cuello, la parte baja de la espalda o los brazos. Si ajustas ambos pedales en posición horizontal, suelta una línea de plomada desde la rodilla. El sillín estará en buena posición cuando la línea pase por el eje del pedal. Después podrás jugar con la configuración del sillín, inclinándolo hacia delante o atrás. No realices cambios demasiado grandes, solo pequeños ajustes en tu posición.